Los hackers de todo el mundo tienen anualmente un encuentro muy esperado. Se trata del Defcon, un salón donde se brindan conferencias y actividades relacionadas con lo último en este campo. Lo novedoso de este año es que habrá actividades para niños de entre 8 y 16 años.
La transmisión del conocimiento es lo que permite que nuestra cultura se mantenga viva y evolucione con los años. Aquellos jóvenes diferentes a la mayoría, adictos a la informática, que comenzaron a aparecer en los años 80 y conocidos como los primeros hackers, han crecido. Ahora tienen familia e hijos; y como buenos padres quieren contarle a los chicos a qué se dedican y qué necesitan saber para que Papá les deje el negocio en el futuro.
La conferencia Defcon de este año tendrá lugar entre los días 4 y 7 de agosto en el Rio Hotel y Casino de Las Vegas, Nevada. El costo de la inscripción es de sólo 150 dólares. La propuesta no es la de enseñar a delinquir a los niños, de hecho la conferencia de adultos también busca moverse dentro de cierta legalidad. Muchos de estos participantes trabajan honradamente como encargados de seguridad de empresas. El término Defcon es usado a nivel de seguridad nacional en Estados Unidos y significa “Condición o Estado de Defensa”.
Esta gente, humildes trabajadores como todos nosotros, quieren darle un lugar a todos esos niños que se sienten diferentes, con otros intereses a los que tienen la mayoría de los estudiantes, tal y como le sucedió a ellos. No van a enseñarles a ser piratas o quebrar la ley, sino quizá cómo aprovechar la tecnología existente para crear otras aplicaciones o desarrollar su creatividad e ingenio. “El mundo de hoy es desafiante y deshonesto” dicen, así que entrenarán a los chicos a cómo preparase y protegerse en el mundo de la internet.
Esta no es la primera experiencia, son muchas las ferias e incluso campamentos de verano que se organizan comúnmente para los chicos entorno a la realidad de la web. Que estos muchachos tengan mala fama o poca simpatía de muchos no quiere decir que sean tan malos.
