Trabajar desde casa se ha vuelto muy popular últimamente. Aún resulta una profesión un tanto nueva y muchos desconocen de qué se trata realmente. Independientemente cual sea la razón por la cual hayas llegado a esta ocupación voy a darte aquí algunos simples consejos para que la vivas más saludablemente. El trabajar en casa puede ser fantástico pero siempre se corre el riesgo de transformarse en "vivir en el trabajo".
Veremos también algunas de sus ventajas y desventajas. Trabajar en casa puede ser algo muy atractivo pensando en un óptimo balance entre el trabajo y el resto de nuestra vida, pero debe tenerse en cuenta algunas cosas, como ya te mencioné.
Por último te presentaré algunas ideas, si es que estás considerando esta posibilidad, de cómo ingresar a este mercado. Veremos algunas herramientas, como también algunas estrategias para comenzar y presentarte en esta actividad.
Ventajas y desventajas del trabajar desde casa
Como toda actividad o trabajo que tengamos, el hacerlo desde casa nos presenta sus ventajas y desventajas. Comencemos estudiando cuáles son las mismas.
Las ventajas
A continuación te voy a mostrar las principales ventajas:
- Hay algunos puntos muy evidentes que se presentan al momento de trabajar en casa. Quizá puedan parecer simples o triviales, pero tienen que ver con detalles diarios de nuestra rutina. Me refiero a cosas como no tener gastos de transporte, combustible, aparcamiento del vehículo, vestimenta adecuada, u otros como la posibilidad de tener tu familia en casa mientras trabajas, sin necesidad de contratar a nadie que cuide a los niños o los más ancianos.
- La flexibilidad es sin dudas una de las ventajas más importantes. No solamente en cuanto a horarios de trabajo, lo cual es muy valioso, sino también en cuanto a otras características de la rutina. Cosas como el tipo de oficina, temperatura, iluminación, el encuadre en el que desarrollaremos nuestra tarea y que es tan importante para hacernos sentir cómodos y felices mientras trabajamos.
- Si necesitamos un ambiente libre de distracciones, nuestro hogar puede ser una buena opción, ya que prescindiremos de otras personas que nos hablen o podemos tomar las medidas necesarias para aislarnos de ruidos y otros factores que nos impidan concentrarnos todo lo que necesitamos.
- La proximidad a tu propio hogar y la familia ya te la he mencionado, pero además del aspecto práctico del cuidado de las personas que puedas tener a tu cargo, es muy importante la sensación de comodidad y confort que uno siente estando en casa. Saber que tenemos a los niños cerca o que tenemos todo lo necesario a nuestro alcance es algo que puede aumentar nuestra productividad al disminuir nuestras ansiedades, tensiones y preocupaciones.
- El trabajo puede presentar muchos factores estresantes, como el simple hecho de tener que llegar hasta él. Trabajando en casa podemos evitar el tráfico, las largas horas viajando, el encontrarnos con personas indeseables con las cuales no nos sentimos a gusto para trabajar y otros.
- Como consecuencia de los factores antes mencionados, podemos decir que el trabajar en casa presenta un ambiente que favorece el aumento de nuestra productividad, al ubicarnos en un contexto óptimo tanto emocional como profesional.
- También podemos pensar en que además de aumentar nuestra productividad, también estamos mejorando nuestra propia salud. El alejarnos de factores estresantes y liberar más tiempo para otras actividades nos ayudará a cuidar mejor de nosotros mismos. Quizá tengamos más espacio para realizar un poco de ejercicio o tener una buena comida tranquilos, preparada en el momento, en lugar de la comida rápida que tanto daño nos hace.
- En este sentido tenemos un mejor balance entre trabajo y vida. Muchas veces sentimos que la vida comienza al volver a casa del trabajo, pero lo cierto es que ella pasa aún en la oficina. El trabajo en casa puede combinarse con horas parciales en la oficina, de modo que ese sentimiento de agobio y de que el tiempo "se nos va" se vea disminuido y mejor equilibrado.
Las desventajas
Una vez que ya sabes las ventajas, ahora toca la parte negativa, hay que ser sincero y no todo es positivo.
- Si bien estar solos nos puede dar mayor tranquilidad, también nos puede llevar al aislamiento y la soledad. El ambiente laboral es una posibilidad también de socializar y conocer gente con la cual establecer vínculos y quizá hasta amistad. El trabajar en casa debe poder combinarse con otras actividades que aporten gran socialización.
- Te he contado de las distracciones y de cómo trabajar en casa puede disminuirlas. Pues bien, si no estamos bien organizados puede sucedernos lo contrario. Si tenemos niños pequeños corriendo alrededor, el teléfono llamando constantemente, ruidos de vecinos, gente llamando a nuestra puerta... nuestro hogar puede ser un lugar más caótico que la oficina.
- Probablemente la mayor desventaja sea el peligro de no poder discriminar entre nuestro trabajo y nuestro hogar. Si tenemos que realizar también tareas del hogar, como limpiar, lavar la ropa, cocinar... podemos mezclar todo nuestro trabajo y no concentrarnos en ninguno. Necesitamos poder discriminar entre el trabajo y las tareas de casa.
- También al vivir en el mismo lugar que trabajamos puede suceder que sintamos que el trabajo nunca termina, ya que siempre podemos desarrollarlo. Podemos tener la tentación de seguir trabajando en horarios que no son los propios o por la presión de ser el responsable de nosotros mismos como profesionales. También aquí el marcar nuestros horarios nos será muy importante.
- Al estar en casa podemos quedar ajenos a desarrollos o posibilidades que se abren a diario en el mercado. El pertenecer a una empresa nos hace más propensos o visibles a posibles ascensos, novedades, oportunidades laborales, nuevos desarrollos y productos, tendencias del mercado... El tener visitas frecuentes a la oficina puede mantenernos en sintonía con el contexto laboral y renovar nuestro compromiso hacia nuestra tarea.
- Definitivamente el trabajar en casa requiere de gran auto disciplina. No es un trabajo para cualquiera, ya es muy fácil el perderse en otras cosas y abandonar la tarea por otras actividades. Se requiere de mucha dedicación, auto control y perseverancia para mantenerse en sintonía y no abandonarse uno mismo. De nuevo, una modalidad mixta, entre algunos horarios de oficina y otros en casa puede ser la mejor solución para muchos.
Consejos para trabajar desde casa
Si ya te has decidido a hacer el intento de trabajar desde casa, voy a dejarte aquí algunos pocos consejos muy prácticos para un buen comienzo. Como verás, todos ellos están basados en las ventajas y desventajas que recién hemos visto.
Crea tu espacio de trabajo
Es muy recomendable que encuentres un lugar, puede ser una habitación o pequeña sala, donde concentrarte para el trabajo. Guarda allí todos tus materiales para no tenerlos desparramados por toda la casa. Preserva los otros espacios para la vida de hogar.
Establece una rutina
Fija horarios de trabajo, como si se tratase de una oficina aunque pueden ser más flexibles. La rutina puede ser buena para organizarse mejor y darle la importancia al trabajo que se merece. El trabajar en casa no significa que la tarea sea menos importante.
Organiza y planifica tareas al igual que en otras actividades
Cuídate del desorden y el caos, aunque no tengas al jefe frente a ti vigilándote es necesario el orden y la organización para trabajar bien. Utiliza la agenda, fíjate horarios.
Relaciónate con otras personas
Uno de los riesgos que se corren es el de aislarse al estar tanto tiempo en casa. Procúrate otros espacios para relacionarte con la gente, no te aísles. Si bien las redes sociales son un buen medio para quienes teletrabajan (en la justa medida), no pueden sustituir el contacto cara a cara.
Tómate tus descansos
Por último, aunque quizá lo más importante, tómate tus descansos y deja de trabajar en cierto momento. Deja el ordenador y dedícate a disfrutar de tu hogar. Fija un horario de trabajo, esfuérzate por cumplirlo pero luego descansa y diviértete.
Pasos a dar (y no dar) cuando comenzamos a trabajar desde casa
Ahora que todo esta listo y todo a tu alrededor ha sido alistado para tu trabajo desde el hogar vamos a seguir algunos pasos prácticos para ponerte en carrera y meter tus manos en el asunto.
El trabajo y las redes sociales
Si vas a trabajar desde casa, necesitas hacer un uso diferente de las redes sociales al que hacías hasta el momento. Es que a partir de este momento, las redes sociales y la web en general serán tu propio CV. Cuando alguien piense en contratarte no verá sólo lo que tú le has enviado, también te buscará en Internet y en las redes sociales, ellas serán tu marca personal.
De esta manera, se nos presenta la posibilidad de no tener sólo que salir en busca de clientes, sino que también los clientes te encuentren a ti. Así que debes trabajar en desarrollar tu propia marca personal, tener una página web profesional y hacer todo lo posible para que otros te vean. No es dejar de hacer lo que ya hacías, sino hacerlo diferente.
El blog personal
En este trabajo, tu tarjeta de presentación debe estar abierta a todos y los blogs personales son una gran forma de implementarla. Un sitio con seguidores que te aprueben y te busquen, donde se vea lo que has hecho y eres capaz de hacer, presenta una gran capacidad de difusión y otra manera de ser encontrado.
Conjuntamente con el blog, otra gran herramienta son tus cuentas de las redes sociales, especialmente para este caso, Twitter y un canal de YouTube. Debes encontrar una temática que satisfaga necesidades del público y brindar contenidos de valor que lo haga.
Piensa internacionalmente
El trabajo por Internet te permite dirigirte a todo el mundo, por lo que debes cambiar tu mentalidad empresarial local por una global. Piensa en cómo dirigirte y tener en cuenta a una comunidad que puede ir más allá de tus fronteras. Sólo debes seleccionar cual será tu porción de público sin querer abarcar demasiado.
Utiliza otras herramientas disponibles
Hay muchísimas herramientas que pueden hacerte la tarea más sencilla y eficiente. Pero cuidado que también hay otras que pueden hacértela más complicada. Entre ellas tenemos los chats, servicios de mensajería y de redes sociales que no apuntan a lo laboral. Ellas pueden hacerte perder mucho tiempo en conversaciones y contenidos que nada tienen que ver con tu tarea.
Hay aplicaciones para trabajar de manera remota, tanto para conectarte a otro equipo en forma remota a un grupo de personas con las que podrías trabajar en equipo. Hay aplicaciones específicas para organizar tareas y medir tu productividad, como también técnicas como la Pomodoro que pueden ayudarte a enfocarte en el trabajo.
En definitiva hay mucha oferta, será cuestión de que tú puedas seleccionar las que mejor te vengan a tu caso y puedas sacarles el máximo provecho a ellas.
Yo llevo bastantes años trabajando desde casa como desarrollador web y no me arrepiento, aunque debes tener presente que puede que no sea un camino fácil, pero merece la pena.