Si aún no tienes un sitio Web para tu negocio físico, estás perdiendo muchas oportunidades de ver crecer tu empresa, y por supuesto la base de datos de clientes a todo nivel: desde clientes de tu localidad hasta visitantes del extranjero, interesados en adquirir tu producto o servicio.
De seguro ya conoces los entresijos de tu negocio físico, así como a tus principales competidores, la oferta y demanda local de tu producto/servicio, y los demás detalles que te tomó años aprender, ¿verdad?
Ya tengo un sitio Web… ¡Pero no funciona! No es para sorprenderse… Es mucho más frecuente de lo que te imaginas. Para miles de personas y empresas, su sitio Web tiene poca o absolutamente ninguna utilidad. ¿Cuál es la razón?
Principalmente, hay dos razones para ello: ausencia de estrategia y descuido. Si tu sitio Web no está rindiendo frutos es porque careces de una estrategia adecuada para darle productividad a la parte online de tu negocio. Respecto al descuido, muchos ignoran que crear un sitio Web implica dedicarle varias horas al día para que produzca beneficios.
La buena noticia es que todo lo que aprendiste sobre negocios en el mundo físico, ¡te será igualmente útil en el mundo virtual para crear tu estrategia! Por supuesto, necesitarás añadir algunos detalles como los siguientes:
Crear una estrategia ganadora. Observa los sitios Web de tus competidores. ¿Prosperan? Para saber el nivel de popularidad que poseen, puedes usar la barra de herramientas de Google para el navegador de Internet. Allí encontrarás el Page Rank del sitio; si está entre 3 y 6, el sitio es un éxito, pero si está más abajo, o es relativamente nuevo, o está en tu misma situación.
Busca sólo a tus competidores exitosos en la Red, olvídate del resto. Mira atentamente qué están haciendo bien, y qué podría mejorarse… para que lo implementes tú mismo. ¡Mejora lo que tus competidores ofrecen!, ya sea en atractivo visual, herramientas de usuario en el sitio, ¡o simplemente mejores precios!
Para concluir tu estrategia, ten en mente que deberás iniciar una campaña de difusión de tu sitio, ya sea nuevo o remodelado. Utiliza la publicidad en redes sociales, crea una fanpage de tu sitio, e invita a todos tus clientes a unirse, ofreciendo regalos, cupones y lo que tu creatividad te aconseje. No olvides enviar invitaciones por correo electrónico a todo el mundo, y recuerda que el SPAM casi nunca paga bien a sus devotos.
Finalmente, actualiza contenidos con frecuencia: ¡que tus visitantes sientan que también en Internet te mueves constantemente hacia el éxito!