Al igual que ocurre en el mundo off line (es decir el de carne y hueso), el vídeo es un recurso sumamente buscado por quienes buscan aprender algo, así como quienes desean conocer más sobre cierto producto, antes de proceder a comprarlo.
En Internet, el canal favorito del mundo entero es Youtube, aunque no podemos desechar alternativas como Vimeo, que aunque no es despreciable, tampoco podría decirse que ofrece una feroz competencia. De hecho, mientras Vimeo debe conformarse con la posición 127 en el rank de Alexa, ¡Youtube ostenta el tercer lugar en el mundo entero!, solo detrás de Google y Facebook.
La principal basa de estos sitios, como ya se sabe, es que permiten crear “canales personales” para publicar contenidos, aunque lamentablemente esto suele representar a la vez un inconveniente, debido a la enorme cantidad de vídeos carentes de contenido, y algunos hasta de no muy buen gusto.
Por la razón antes mencionada, por razones de derechos de propiedad intelectual, y para obtener los mejores resultados, lo mejor será crear nuestros propios contenidos, o hacer una buena selección de los mejores vídeos relacionados con el tema sobre el que planeamos ganar dinero, no sin antes verificar que podemos publicarlos en nuestro sitio Web con su autor.
Ahora bien: para lograr que Youtube realmente trabaje para ti, deberás crear un canal con actualizaciones periódicas (al menos una o dos veces por semana), por supuesto con vídeos que aporten beneficios para los posible suscriptores. Un ejemplo bastante popular en Estados Unidos es el canal personal de ejercicio físico y desarrollo de musculatura.
Un truco interesante es publicar vídeos cortos pero llenos de información útil, y un vídeo con información detallada al mes (incluyendo todos los contenidos de este período), para que lo revisen los más entusiastas.
El siguiente truco es distribuir parte de la información en tu blog de WordPress, y la otra en el blog, para lograr que el tráfico conseguido en el canal de Youtube, fluya hacia tu propio sitio Web, donde deberás colocar con gracia tus anuncios comerciales, para que no parezca que llevaste al usuario a una encerrona para venderle algo.
El truco final es interactuar activamente con canales de Youtube similares al tuyo, proporcionando consejos que complementen la información del vídeo comentado, sin sonar competitivo, y dejando de vez en cuando enlaces a tu propio sitio, o respuestas de vídeo, sin parecer confrontador o un vulgar vendedor ansioso.
La sutileza y la discreción son la clave en esta estrategia de vídeos en Youtube.
