¿Hay que evitar a ciertos tipos de clientes? La pregunta suena sorprendente, como si el objetivo de todo negocio no fuese conseguirlos. Pero lo cierto es que hay algunos clientes (si se les puede llamar así), que lejos de generarnos ganancias nos traerán problemas y dolores de cabeza. Así que dejamos aquí algunos consejos para dormir más tranquilos por las noches sin amenazar nuestros ingresos.
Simplemente hay casos en que no podemos comunicarnos con las personas. Y cuando la comunicación falla difícil será llegar a buen puerto. Esto es común con ciertos tipos de clientes que te presentamos a continuación. Tengámoslo en cuenta antes de embarcarnos en negociaciones con ellos.
Abusivos y mal educados
Son personas que por el hecho de pagar por un servicio se creen con el derecho de tratar mal al proveedor y faltarle el respeto.
No pagador
Luego de que realizamos todo nuestro trabajo y llega la hora del pago nos encontramos con que no puede hacerlo. Son quienes nos contratan y aunque acordamos un precio de antemano, no pueden pagarnos.
Sabelotodo
Hay quienes creen saber más que nosotros y nos dicen cómo tenemos que hacer nuestro trabajo. Muchas veces por hacerles caso hacemos algo que no sabemos y nos termina saliendo mal.
Sin horarios
Es el cliente que piensa que estamos a su disposición las 24 horas del día los 365 días del año. Nos llama los días y horas más inapropiadas por detalles que bien pueden esperar.
Indeciso
Como no sabe qué es lo que quiere, nos cambia el trabajo continuamente. Hoy quiere que le hagamos una cosa y mañana cambia a otra totalmente diferente.
Avaro
Acordamos un trabajo y un precio pero luego quiere algo mayor sin pagar más. Piensa que por el simple hecho de pagar puede tener acceso a cualquier tipo de trabajo y exigir todo lo que se le ocurre.
Así que a tener los ojos bien abiertos y si te cruzas con uno de estos piensa bien qué hacer. ¡No digas que no te avisamos!