Quizás no todos sepamos de qué estamos hablando cuando se trata de los temas hijos en WordPress. Es probable que desconozcamos las ventajas y desventajas que ellos ofrecen. Por tanto nos será difícil poder decidir si un tema de este tipo es lo que necesitamos o no. Así que veamos un poco de qué se tratan y qué tienen para ofrecernos, sus potencialidades y limitaciones.
Estos temas WordPress heredan sus funcionalidades de otro tipo, los parentales o “parent theme”. Comúnmente son utilizados cuando queremos personalizar o modificar un tema existente sin perder la posibilidad de actualizarlo. Anteriormente, no había una manera sencilla de actualizar un tema sin perder toda la configuración personalizada y las modificaciones hechas. Son evidentes los contratiempos e incomodidades que esto genera. Para esto es que se introdujeron los conceptos de temas parentales y de hijos o “parent” y “child”.
Los temas hijos heredan todas las funcionalidades, características y el código del parent sin hacer cambios en el último. Esto permite que podamos cambiar estilos y realizar otras modificaciones sin perder la posibilidad de actualizar el parent.
Los temas parent no son todos iguales, algunos son más potentes y con más posibilidades que otros. Algunos son muy completos y nos evitan la necesidad de implementar líneas de código para muchas cosas que queramos. Los temas hijos en WordPress nos permiten una alta personalización sin tener que modificar el parent y pudiendo actualizarlo de manera sencilla. Nos permiten flexibilidad sin tener que implementar líneas de código.
Como contrapartida será necesario conocer en profundidad el uso del tema parent para poder usar el child. También de alguna manera quedamos en manos del desarrollador del parent. Si en algún momento su desarrollo se detiene es posible que nos quedemos sin futuras actualizaciones.
