En la actualidad es innegable la presencia de un negocio en los medios sociales. Las redes sociales tienen una cantidad increíble de usuarios, también de herramientas y aplicaciones de las cuales valerse. Y por encima de todo esto, son gratis. ¿Qué más podemos esperar? La pregunta que les presentamos es si nuestra página en los medios sociales debería ser nuestro hogar, o sitio oficial, de inicio, como prefiramos llamarle. La respuesta que desarrollaremos a continuación, es NO.
Para comenzar, el espacio en los medios sociales, no es realmente nuestro. Hacemos uso de él y podemos personalizarlo hasta cierto punto. Pero nuestra propia página o blog, es nuestro espacio, que controlamos, decoramos, configuramos y poseemos. La tarea en las redes sociales se trata de vincularse con otras personas para atraerlas a nuestro sitio propio.
Tengamos en cuenta que cuando una red social decide cambiar su diseño o las posibilidades que tenemos en nuestra cuenta, nada podremos hacer. Además no controlamos lo que se dice, publica o comenta de nosotros en la red.
Nuestro sitio además no se trata sólo del espacio físico, sino también de cómo interactuamos con nuestros visitantes. Nuestros correos electrónicos, nuestros formularios de registro, las preguntas y respuestas, todo nuestro trabajo forma parte de nuestro “hogar”.
El conseguir “amigos” o “seguidores” en las redes sociales no es algo difícil, se trata de relaciones basadas en simpatía o un simple “me gusta”. Si hablamos de negocios, estas no son relaciones lo suficientemente sólidas para nuestras actividades. Sin embargo a través de nuestro sitio o blog, las suscripciones y las cadenas de correos representan otro tipo de relación. Estas si demuestran un definido interés en nuestro producto. Esto representa un verdadero nexo entre el público y nuestro negocio.
No está mal invertir un poco de trabajo en los medios sociales, pero recordemos que su verdadera utilidad está en llevar al público a nuestro propio sitio, donde los negocios se cerrarán.
